Domingo de misericordia, donde el Señor una vez más nos recuerda que nos ama y que quiere que volvamos a Él. Sin importar nuestras debilidades o aquellas cosas que nos alejaron de su presencia.
Quiere que depositemos su confianza en Él, que hagamos de nuestra vida un templo de su amor.
Nos quiere devolver a la luz, para que con esa llamita iluminemos a los demás.
EL MISMO DIOS TE INVITA A NACER DE NUEVO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario